martes, 15 de agosto de 2017

ARMONIA



La mente es una de las cosas más importantes de la vida, pero solo como criada, no como ama. Cuando la mente se adueña de ti, surge el problema: reemplaza a tu corazón, reemplaza a tu ser, se apodera por completo de ti. Entonces, en lugar de cumplir tus órdenes, es ella la que te da órdenes a ti.

Tenemos que reconocer que la mente es el fenómeno más evolucionado de la vida. Pero siempre procurando que no se convierta en nuestro amo.

Recuerda que tu Ser es lo primero, lo segundo tu corazón y lo tercero la mente. En eso consiste la personalidad equilibrada de un verdadero ser humano. La mente es lógica, tremendamente útil, y no se puede sobrevivir en este mundo sin ella, nos ha proporcionado la tecnología, la ciencia, pero nos ha dado tanto que se ha erigido en dueña de nuestro ser. Es ahí donde comienza el daño, porque puede cerrar por completo las puertas del corazón.

La mente no tiene compasión, para la compasión, para el amor, para la alegría, para la risa…hace falta un corazón, ya que este posee un valor superior. Tendríamos que hacerle más caso al corazón en primer lugar si existiera cualquier conflicto entre la mente y el corazón. En cualquier problema entre el amor y la lógica, la lógica no puede ser determinante; ha de serlo el amor.

La lógica sirve para hacer cálculos, para las matemáticas y la tecnología científica, pero no sirve para las relaciones humanas, ni para el crecimiento potencial interno de cada persona. Tenemos que dejar descansar la mente. ¡Lo necesita! Y resulta muy sencillo: basta con actuar como testigo, y entonces lo conseguiremos.

Por encima del corazón está el Ser. Al igual que la mente es lógica y el corazón es amor, el Ser es meditación y conocimiento de uno mismo, y al conocerte a ti conocerás el significado de la existencia.

Conocer a tu Ser significa hacer la luz en la oscuridad del mundo interior, y al menos que te ilumines interiormente, la luz del exterior no te servirá de nada. Si no te conoces, dentro de ti solo existirá inconciencia, y todos tus actos brotarán de esa oscuridad, de esa ceguera.

Encuentra tu Ser, tu Ser real, tu existencia, mediante la meditación, mediante el amor, mediante el corazón, y comparte tu dicha.

Todos los seres humanos deberíamos tener en armonía; la mente, el corazón y el Ser. Porque cuando la mente sirve al corazón y el corazón al Ser, este te hace formar parte de la inteligencia que se extiende por todo lo que existe. Y no existe NADA por encima de eso.

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