domingo, 10 de septiembre de 2017

OTOÑO


 
El otoño es la estación del año que nos prepara para la llegada del frio. Nuestro cuerpo comienza a hacer cambios preparándose para adaptarse a la estación, que puede resultarnos difícil de afrontar. Tras el relax del verano, volvemos a la rutina lo que influye en nuestro estado de ánimo, que puede acabar por los suelos.

Es importante que aportemos a nuestro organismo aquellos alimentos que nos ayuden a contrarrestar nuestro desgaste físico y mental. Tendremos que comer alimentos más “pesados” y caloríficos, beber líquidos calientes, hidratarnos más y procurar adoptar nuestro ritmo a la naturaleza que comienza a ralentizarse antes de “dormir” el sueño invernal.

El naranja es el color del otoño. Corresponde al Chakra asociado a la creatividad, la confianza en uno mismo, las relaciones con los demás, el deseo y la sexualidad. Se ubica justo debajo del ombligo y gobierna los órganos sexuales y (en las mujeres) el útero. Si tenemos equilibrado este Chakra, nos sentimos fuertes, en sinergia con nuestras emociones. Se asocia también al agua, por lo que conviene hidratarnos bien.

Estos son algunos de los alimentos que nos pueden ayudar este otoño.

Calabaza: Esta hortaliza es rica en potasio, vitamina B y fibra.

Kiwis: Es una de las frutas con mayor concentración de vitamina C, es una gran fuente de potasio y cobre. Su alto contenido en fibra nos puede ayudar en caso de tener problemas para ir al baño.

Manzanas: Son ricas en antioxidantes y fibra. Se pueden tomar crudas, asadas o en compotas.

Granadas: Tienen un aporte calórico bajo. Con gran contenido en vitamina C, además es rica en ácido málico, flavonoides (pigmentos con acción antioxidante), taninos, sustancias con propiedades astringentes y antiinflamatorias.

Coles: De Bruselas, la coliflor, el repollo, la lombarda o el brócoli, son ricas en vitamina C, en hierro, y tienen fitoquímicos con acción antioxidante. Fortalecen el sistema inmune, por lo que son ideales para combatir los resfriados.

Cúrcuma: Es de gran ayuda para combatir la dispepsia, digestiones lentas, gastritis, enfermedades hepáticas. Es antinflamatoria, estimula el sistema nervioso pero además tiene efectos en el sistema inmunitario y el estado de ánimo. 

Zanahorias: Son muy ricas en fibra, ácido fólico, potasio, calcio, magnesio y vitamina C. Pero si en algo destacan las zanahorias sobre los demás vegetales es en su gran aporte en vitamina A y antioxidantes. Su color anaranjado es debido a unos pigmentos vegetales con propiedades antioxidantes, llamados betacarotenos.

Naranjas: La naranja es un poderoso antioxidante por la gran cantidad de Vitamina C que contiene, por ello favorece la cicatrización, y refuerza es sistema inmunológico de organismo. También contiene calcio, magnesio, beta caroteno, ácido fólico, fósforo, potasio, cobre, zinc, ácidos málico, oxálico, tartárico y cítrico.

Papaya: La papaya es sumamente rica en antioxidantes, entre los que destaca especialmente el contenido de licopeno, un carotenoide natural que contribuye a la particular coloración de esta fruta, y que es precisamente la que aporta esas cualidades antioxidantes.

Boniatos: fuente excepcional en antioxidantes. Tiene tanto betacaroteno como las zanahorias y tanta vitamina C como las patatas, pero además contiene potasio, hierro, calcio, magnesio fósforo y fibra en cantidades significativas. Moderado en proteínas (1,7%), sus nutrientes mayoritarios, sin embargo, son los hidratos de carbono, que se absorben lentamente sin provocar subidas de insulina.

Pomelo: 1) Carbohidratos. El agua es el componente más abundante, con algo más de un 90 por ciento del pomelo. Fuente de vitamina C, ácidos málico, oxálico, tartárico y cítrico. Flavonoides. Minerales, fibra y carotenoides.

 

Melocotones: Cien gramos de melocotón nos proporcionan tan solo 39 calorías. Esta fruta es rica en minerales, nos proporciona calcio, potasio, fósforo, hierro y manganeso. Además contiene Provitamina A,B1, B2 y C. También nos aporta fibra. Son ricos en flavonoides.

Estos son algunos de los alimentos que nos ayudaran este otoño, pero hay muchas más cosas que nos pueden ser de gran ayuda por ejemplo; nuestra actitud para preparar la comida, el amor es el mejor ingrediente y no dudéis que al comer ese amor volverá a vosotros a la vez que nutre a los demás.

Recordar que sonreír produce un efecto calmante y desestresante y  disminuye el ritmo cardiaco. Al sonreír, dieciséis músculos faciales trabajan simultáneamente.  Nuestro cuerpo libera endorfinas, de forma parecida a cuando corremos, se trata de una autentica gimnasia cerebral. Y si pensáis que al enfadarnos consumimos mucha energía, comprenderéis que nos interesa sonreír.

De manera que…
Usa tu sonrisa para cambiar el mundo y no dejes que el mundo cambie tu sonrisa.-Anónimo

Feliz otoño