LA JUSTICIA
11. Como vibración numérica personal. El 11 se incluye entre los números capitales, junto con el 22, y el 33 y el 44. Todos los números capitales tienen un gran poder, ya que acentúan la vibración del número básico al que reducen.
La persona número 11 atrae hacia sí las fuerzas cósmicas, que le inspiran y le ayudan a encontrar la iluminación y la inmutable conciencia cósmica. Sus señaladas facultades intuitivas guiaran su mente original, inventiva y creativa. Como sin duda alguna serás un líder, debes usar con prudencia esas altas vibraciones. El verdadero dominio se encuentra en el secreto de los demás y, en el papel que tendrás que asumir, necesitas mostrarte tan práctico como idealista.
Tu penetración y tu percepción te permiten una amplia visión del futuro. Eres idealista y sientes compasión por toda la humanidad, sin tener en cuenta el lugar que ocupa cada uno en la vida. El deseo de iluminar a los demás despierta en ti al maestro. Serás pues un memorable maestro, orador, predicador o escritor, de esos a quienes su profunda comprensión de las necesidades de la gente inspira y abre nuevas vías de expresión.
Tu talento para la educación no permanecerá desconocido por mucho tiempo y probablemente llegaras a ser famoso. Eres el especialista que busca la perfección más que la gloria pero que, al mismo tiempo, acaba siempre por ganarse el prestigio. Tienes el valor de tus propias convicciones y lucharás legalmente para verlas puestas en obra. Llevarás una vida atareada y activa, siempre haciendo frente a pruebas y desafíos. Aunque te excedas en cuestiones de emociones, fortuna y salud, la alta vibración del 11 te impulsará con un ánimo renovado y sorprendente.
Te sientes interesado por la percepción extrasensorial, lo oculto, la mística y los estudios espirituales. Explotarás con mayor facilidad tu gran potencial creativo recurriendo a alguna disciplina metafísica o filosófica. Como artista inspirado, crearás objetos de exquisita belleza, que despertarán en quienes los contemplen sentimientos profundos. Deberías trabajar con personas de tu misma naturaleza.
Cuando la persona no responde a la alta vibración del 11, vive como un 2 (consulta la descripción de este número). Se enredará en detalles de su trabajo y tal vez se vea forzado en cierta medida a llevar una vida de servidumbre.
En caso de un 11 negativo, utilizará su poder de manera peligrosa, hasta el punto de llegar a actuar en su propio perjuicio, creando karma negativo. Se mostrará injusto, lleno de perjuicios y severo y habrá de proveerse contra peligros ocultos. Sin embargo puede redimirse mediante las obras de caridad.
Aprovecha tu 11 para edificarte una vida equilibrada, en que todas tus acciones estén pesadas y medidas. Tu gran penetración y tu inspirada devoción significarán un oasis en la agotada vida de mucha gente.
SIMBOLISMO DEL TAROT. Clave 11: La Justicia. La clave 11, que trata de establecer el equilibrio a través de la justicia, trae consigo enseñanza, educación y guía. La balanza simboliza también la doctrina del karma: labor, acción y reacción, la ley de causa y efecto.
La lección más destacada de le clave 11 consiste en ponderar la significación de las condiciones presentes y llegar al equilibrio superando los errores del pasado. Utilice la espada del descernimiento para eliminar los pensamientos erróneos. La Justicia está regida también por Libra, lo cual demuestra que nos comunicamos únicamente a través de la séptima casa de la cooperación y a través del principio del amor. Libra rige los riñones, los órganos de la eliminación de las toxinas venenosas, asegurándonos un verdadero equilibrio.
La balanza representa el equilibrio. En ella hay siete líneas rectas de la misma longitud, equivalentes a los siete centros del cuerpo y a los siete planetas originales: Mercurio (clave 1), la Luna (clave 2), Venus (clave 3), Júpiter (clave 10), Marte (clave 16), el Sol (clave 19) y Saturno (clave 21).
CORRESPONDENCIA ASTROLÓGICA: Urano (y Libra). La vibración de Urano se intensifica en el número capital 11. Se trata de una vibración de prueba, en la que se exige ponderar y analizar la intensa energía que recorre la vida del sujeto. Si utiliza esa gran energía personal de manera impetuosa o inapropiada, provocará accidentes, dificultades legales y decisiones impulsivas.
Libra procura calmar la energía nerviosa de Urano, enseñando a usar esas facultades en armonía con el medio ambiente y a presar ayuda a otros. La posibilidad de un accidente se transforma entonces en un impulso orientado hacia una meta especifica; las dificultades legales desembocan en importantes contratos, y los actos impulsivos se truecan en decisiones positivas. El sujeto sirve de catalizador y, como siempre, a él le toca decidir cómo emplear la fuerza primaria del mismo.
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