jueves, 30 de mayo de 2019

¿QUÉ ES EL KARMA?





Cada persona es heredera de sí misma. Con esta frase podemos deducir que; nacemos en un lugar determinado, en un siglo, en una familia y en una sociedad que están hechos a la medida de la nueva experiencia que hayamos elegido tener en la nueva encarnación. Este destino está marcado por las experiencias que hayamos tenido con anterioridad, en otras existencias, diremos pues que: el presente es consecuencia del pasado, y el futuro lo es del presente.

Como si de una universidad se tratará nuestro espíritu va progresivamente adquiriendo experiencias de este nivel de existencia, el más denso, si durante el “curso” no aprobamos determinadas “asignaturas” tenemos que repetirlas.
Esto que la mayoría calificamos de Karma, no es, ni más ni menos que una Ley Universal:

LA LEY DE CAUSA Y EFECTO.

Esta Ley está continuamente en el plano de lo cotidiano, sabemos que todo lo que produzcamos con nuestros actos tendrá una reacción en el entorno, día a día experimentamos lo que significa el intercambio retributivo y continuo, que es la base de nuestra existencia.

Si admitimos la Ley Kármica y la reencarnación, tenemos que pensar que donde nacemos y en que enclave, no es cuestión del azar, sino que es la forma de “actualizar” nuestra personalidad y de esta forma desarrollar nuestro trabajo evolutivo.

Aunque nos parezcamos al núcleo familiar en el que hemos nacido, desde muy pequeños ya surgen contradicciones y divergencias en la adaptación con el medio, de hecho la mayoría de veces los hermanos  tienen un carácter totalmente distinto, siendo educados en el mismo hogar y con los mismos padres.

Para los hindúes cuando la persona muere sus experiencias pasan a formar parte de la gran biblioteca del Universo -Akasha-, que constituye el cuerpo etérico del planeta. Ahí es donde se concentran todos los pensamientos del mundo, formando un aura que podría ser lo que Jung definió como el inconsciente colectivo de la humanidad. Nuestra memoria grupal. Las experiencias de cada uno de nosotros en nuestras existencias anteriores están en nuestro interior, forman el equipaje psicológico y espiritual que traemos  en nuestro regreso a la Tierra, con los objetivos y las diversas tareas que tendremos que realizar.

En cada uno de nosotros la energía de Akasha está representada por el planeta Venus, la cual cuando desciende de los planos sutiles hasta el universo materializado la transforma en Luz, sonidos y colores creando las formas lumínicas. A Venus la acompaña Mercurio, la Inteligencia del mundo, ambas energías se encuentran en nuestro interior aportándonos  sus cualidades y haciéndonos comprender que formamos parte de ese gran todo cósmico. 
Para ayudarnos tenemos también dentro de nosotros una herramienta igualmente universal: el deseo, simbolizado en nuestra carta natal por el planeta Marte, que es el motor de nuestra acción cotidiana. 

Este planeta pone en marcha nuestras energías y las encauza hacía la conquista de la meta. Es la energía física, el calor corporal, el impulso de ir más allá de la mera vida vegetativa, al crear en nosotros la ilusión de la duración, dota de realidad al tiempo. Porque el ser humano quiere existir, probar, conquistar, reproducirse, porque el ser humano teme el silencio, la inercia, la muerte, Marte crea en nuestro interior el deseo de la obra kármica y anima a la rueda de la vida. En sánscrito Marte se  denomina Kama, el origen del Karma.

En la astrología Kármica la meta de nuestra vida está determinada por la posición de los Nodos Lunares en los signos donde se encuentren y en las casa, estudiaremos también todos aquellos elementos que estén conectados a ellos, ya sean planetas o aspectos significativos. Tenemos que mirar la carta natal de forma global y con los Nodos como base, revisado toda la astrología, puesto que los planetas son el origen y no la causa, y ese origen es preexistente al nacimiento de la persona.

La primera lectura consiste en descifrar los elementos kármicos del dibujo y sintetizarlos.

La segunda permite deducir cuál es la línea de evolución de la carta en función de las indicaciones del Nodo Norte.

El tercer nivel de estudio nos dirá la meta evolutiva que debemos seguir en la vida cotidiana, y en que etapas se producirán acontecimientos que nos ayuden a tomar conciencia de ella. 

El decorado está listo, los personajes existen, pero el guion está por escribir.


martes, 28 de mayo de 2019

DISTANCIA PSICOLÓGICA




“Ojos que no ven, corazón que no siente” dice un antiguo proverbio. Sin embargo, negar la evidencia y mirar hacia otro lado no suele ser la mejor estrategia sino que puede conducirnos a tomar malas decisiones de las que después terminemos arrepintiéndonos.
Al respecto, la filósofa Ayn Rand dijo: “podemos evadir la realidad, pero no podemos evadir las consecuencias de evadir la realidad”. Por eso, en vez de ignorar los hechos y simplemente sentarnos a esperar que la vida decida en nuestro lugar, lo más inteligente es aprender a establecer una distancia psicológica.

¿Qué es la distancia psicológica?

No percibimos de la misma manera un evento cuando se desarrolla cerca de nosotros que cuando ocurre en la distancia. Cuando los hechos ocurren muy cerca, respondemos con un mayor nivel de activación emocional puesto que percibimos que podemos vernos implicados directamente en la situación. Cuando ocurren más lejos, nos sentimos más tranquilos y el nivel de implicación emocional es mucho más bajo.

Por tanto, la distancia psicológica es el espacio subjetivo que percibimos entre nosotros y las cosas, los sucesos o las personas. Es una experiencia de separación de carácter egocéntrico, en la cual nos convertimos en el punto de referencia, a partir del cual vemos las cosas en perspectiva, como si fuéramos una tercera persona no involucrada en la situación o, al contrario, nos implicamos a nivel intelectual y emocional. La habilidad para ajustar la distancia psicológica es importantísima para la vida, como comprobó un estudio desarrollado en la Universidad de Michigan.

Estos psicólogos hallaron que cuando asumimos una distancia psicológica no solo somos más propensos a reconocer los límites de nuestro conocimiento sino que también aceptamos la probabilidad de que el futuro cambie. En práctica, la distancia psicológica nos permite ser más humildes y autoconscientes, siendo a la vez más flexibles y abiertos a la incertidumbre, características clave para convertirnos en personas sabías y equilibradas.

Los dos niveles de análisis de la distancia psicológica

Todos los eventos se pueden ubicar en una línea imaginaria respecto a nosotros, en un extremo colocamos lo “absolutamente distante” y en el otro lo “absolutamente cercano”. En base a ello, activamos un nivel de procesamiento, que puede seguir dos vías: la baja o la alta. Ambos se activan inconscientemente, pero los aplicamos día tras día.

La vía alta

Cuando un evento es distante en el tiempo, en el espacio, difiere de nuestro ámbito social o es muy improbable que ocurra, lo procesamos de manera “alta”. Es decir, trabajamos con una representación abstracta, simple, estructurada y descontextualizada porque estar “lejos” simplemente nos impide acceder a una imagen más precisa o no nos motiva a profundizar en lo que está sucediendo.

Lo interesante es que cuando se activa la “ruta alta”, solemos aplicar ese nivel de procesamiento a toda la información entrante relacionada con el suceso. Es decir, aplicamos un esquema más impreciso y general a todo lo que, de una forma u otra, esté relacionado con la situación que percibimos como lejana.

Las investigaciones sobre las decisiones de ahorro para la jubilación sugieren que, aunque las personas saben que deberían ahorrar más para el futuro, gastan mucho y ahorran poco. Esto se debe a que la jubilación se procesa por la vía alta ya que se percibe como algo muy distante. Y todo lo que esté relacionado con ese tema también se procesa dela misma forma, de manera que no creemos necesario tomar acciones concretas aquí y ahora, simplemente lo postergamos. Ese es uno de los efectos de la distancia psicológica.

La vía baja

Si los eventos están más cerca en el espacio y el tiempo, nos sentimos identificados con ellos o es bastante probable que ocurran, activaremos la “vía baja”. Eso significa que construiremos representaciones lo más concretas posible, complejas, desconstruidas y descontextualizadas. Eso es precisamente lo que hacemos con toda la información importante en nuestra vida.

Cuando algo es relevante, generalmente es un hecho muy concreto, pero aun así se extiende a muchas áreas de nuestra vida y generalmente terminamos con una idea bastante compleja pero desordenada de lo que está ocurriendo porque estamos explorando diferentes opciones para intentar encontrar una explicación satisfactoria.

Si una relación de pareja va mal, estaremos tan implicados emocionalmente con lo que sucede que lo procesaremos por la vía baja. Nos resulta difícil asumir una distancia psicológica y reflexionar objetivamente sobre la situación que estamos viviendo. Todos los sucesos vinculados con esa relación se agolparán en nuestra mente generando caos y confusión, pero no seremos capaces de valorarlos adecuadamente porque las emociones nos lo impiden.

¿Cómo ajustar los diferentes niveles de distancia psicológica?

La distancia psicológica se manifiesta en diferentes niveles, cada uno tiene un efecto concreto en nuestro comportamiento y emociones, un fenómeno que estudia la Teoría del Nivel Construal. Esos niveles se pueden ajustar para poder asumir una actitud más objetiva, analizar nuestros sesgos cognitivos y el nivel de implicación emocional en la situación. En la mayoría de los casos es necesario aumentar la distancia psicológica, pero en otras ocasiones debemos disminuirla para realizar un análisis más concreto y sensible del problema.

Distancia Social.

La distancia social es aquella que existe entre nosotros y los demás, la cual se acorta cuando somos capaces de ponernos en el lugar del otro y ser empáticos. Al contrario, se alarga cuando usamos un lenguaje más abstracto y despersonalizado, o cuando no nos mostramos receptivos a su discurso y no validamos sus emociones.

Distancia Temporal.

La distancia temporal se mide en términos de pasado, presente y futuro. Se ha demostrado que cuando establecemos plazos más cortos somos más productivos, nos agobiamos menos y terminamos obteniendo mejores resultados. La estrategia psicológica para gestionar adecuadamente la distancia temporal es visualizar el futuro. Por ejemplo, si te sientes ansioso por un proyecto que debes entregar, imagina que ya lo has entregado. Centrarte en los resultados inmediatos te ayudará a relajarte y obtener mejores resultados.

Distancia Espacial.

La distancia espacial es una de las más sencillas de manipular. Por ejemplo, se ha demostrado que cuando alejas de ti un objeto disminuye tu interés. Es un truco especialmente interesante para las dietas, pero poner una distancia entre la persona con la cual estabas discutiendo también te permitirá alejarte un poco del problema y serenarte.

Distancia Experiencial.

La distancia experiencial se mide por la brecha entre lo que imaginamos y esperamos y lo que finalmente vivimos. Cuanto más grade sea la brecha, mayor puede ser la frustración y el enfado. Al contrario, cuando más pequeña sea mayor será nuestra satisfacción. La manera de manipular esta distancia consiste en mantener a raya nuestras expectativas. Disponernos a vivir las experiencias sin expectativas es la mejor manera de sacar el máximo provecho de la distancia experiencial.

Lo interesante es que, cada vez que ajustas un novel, acortas o alargas la distancia psicológica, de manera que puedes implicarte más en la situación o, al contrario, asumir una perspectiva más objetiva. Según la situación y tus estrategias de afrontamiento, puedes jugar con las diferentes distancias para tomar en cada momento las mejores decisiones.


martes, 21 de mayo de 2019

CARENCIAS.....






CARENCIAS EN NUESTRO INTERIOR……

Cuando las carencias en nuestro interior nos impiden juzgar sanamente a los demás, aparece lo que se denomina la proyección negativa. Una serie de mecanismos de defensa que atribuyen a otras personas nuestros propios defectos, e incluso nuestras propias carencias. En situaciones de conflicto emocional, atribuimos a otras personas los sentimientos o pensamientos propios que resultan inaceptables para nosotros.

La proyección negativa maniobra en situaciones de conflicto emocional de origen interno, atribuyendo a otras personas los sentimientos o pensamientos propios que resultan inaceptables para nosotros. Se proyectan los sentimientos o pensamientos que no terminan de aceptarse como propios porque generan angustia o ansiedad dirigiéndolos hacia alguien y atribuyéndolos totalmente como si fueran de otra persona.

Gran parte del trabajo que se realiza en el desarrollo personal consiste en librarse de estas proyecciones estableciendo una frontera definida entre la descripción que hacemos de lo que sucede y lo que sucede realmente. De esta manera evitamos la distorsión de los hechos superando el conflicto que en realidad solo existe en nuestro interior.

“No vemos a los demás como son, sino como somos nosotros mismos”

-Emmanuel Kant-

La defensa del yo en las carencias personales
La proyección externa de las propias carencias personales que nos producen ansiedad o angustia se realiza para mantener a un buen concepto personal. La autoestima y los mecanismos de defensa juegan un papel fundamental en la defensa del yo. Los llamados mecanismos de defensa del yo son estrategias que utilizamos sin darnos cuenta, cuya función es preservar nuestra autoimagen y autoconcepto.
Nuestro cerebro parece haber desarrollado diferentes formas para proteger nuestro organismo de aquello que nos parece demasiado doloroso o inaceptable. Los mecanismos de defensa son estrategias para frenar el malestar de ciertas vivencias y los sentimientos asociados a ellas. Estos mecanismos nos protegen cuando no queremos reconocer algún aspecto de nosotros mismos que nos disgusta o rompe el autoconcepto que nos habíamos creado.
El problema viene cuando estos mecanismos se automatizan a fuerza de utilizarlos una y otra vez. Así, resulta difícil abandonar el hábito, pese a que como contrapartida nos generen desequilibrio en ciertos aspectos madurativos. Es normal utilizar a veces estos mecanismos, pero hay que saber identificarlos y combatirlos para no distorsionar la realidad a medida de nuestro ego.
De otra manera, estos mecanismos se volverán contra nosotros introduciendo distorsiones importantes en nuestra percepción, además de hacerlas más complicadas de identificar porque se camuflan fácilmente entre nuestras percepciones más realistas.
Nuestro mecanismo se defensa consiste en parecer fuertes cuando estamos débiles y débiles cuando estamos fuertes.
Lo que vemos en los demás nos dice mucho de nosotros mismos.
Los demás actúan como un espejo para nuestra mente, en él vemos reflejadas diferentes cualidades o aspectos de nuestro propio ser. Cuando observamos algo que no nos gusta de alguien, sentimos desagrado y rechazo, esto puede indicar que de alguna manera ese aspecto nos desagrada en nuestro interior.
La proyección psicológica nos hace pensar que el defecto solo existe ahí fuera, en esa otra persona. Es un, mecanismo de defensa mental mediante el cual una persona atribuye a otros sentimientos, pensamientos o impulsos propios que niega o le resultan inaceptables para sí misma.
Cuando nuestra mente entiendo que existe una amenaza para la salud mental, está atribuirá las cualidades inaceptables a un sujeto externo a nosotros mismos. De esta manera nuestra mente logra aparentemente, autoengañarse, poner estos contenidos amenazantes fuera de nosotros mismos.
Estas proyecciones son válidas tanto para características negativas, odio, rencor, envidia, como para positivas, como admiración, idealización, cariño, etc.
Por lo tanto, cuando critiquemos en exceso a otras personas, puede que nos estemos criticando a nosotros mismos.
“Todo lo que te molesta de otros seres es sólo una proyección de lo que no has resulto de ti mismo”
--Buda--
Fuente: Fátima Servián Franco



sábado, 18 de mayo de 2019

LAS ALERGIAS





LAS ALERGIAS



La alergia es el estado de un sujeto que, por contacto anterior con un antígeno apropiado, ha adquirido la propiedad de reaccionar cuando se da una segunda agresión por el mismo antígeno, de un modo diferente, frecuentemente más violento e incontrolable.

Una alergia es una respuesta sobre-activada del sistema inmunitario a un antígeno. La sustancia alergena no conlleva reacción en la mayoría de la gente pero está identificada como peligrosa por el sistema inmunitario.

Relación psicosomática.

Esta respuesta, resultado de una causa interior, es el medio por el cual el cuerpo me indica que vivo un estado de agresividad y hostilidad con relación a una persona o una situación cualquiera, es la interpretación que hace mi mente de algo que vivo como muy especial.

Las alergias (incluyendo la fiebre del heno) son parecidas al asma, pero la reacción se sitúa más al nivel de los ojos, nariz y garganta, en vez de los pulmones o del pecho. ¿A qué tengo alergia? ¿Qué es lo que  causa realmente la irritación y la fuerte respuesta emocional de mi cuerpo (ganas de sonarme, lagrimeo de los ojos, ganas de llorar)?.

Son las respuestas del sistema emocional, la liberación de emociones suprimidas por una reacción de mi cuerpo. Éste reacciona a algo, es una especie de símbolo mental, porque intenta rechazar, ocultar, o ignorar lo que le molesta. Rechazo pues una parte mía que me agrede. Es el medio que utilizo para expresar mis emociones, para echar afuera lo malo.

Nada puede parar esta reacción por el momento, ya que esto no es racional porque forma parte del instinto y del inconsciente.  Siento como si hubiese algo, un enemigo que aparta mis barreras de protección. Este enemigo coge poder de mi poder dándoselo a los demás en perjuicio mío.

Esta sería la conclusión

Me siento amenazado  por cierto miedo inconsciente, hasta el punto de no querer vivir. Las alergias tienden pues a indicar un profundo nivel de intolerancia, quizás el miedo a tener participar plenamente en la vida, a liberarme de las muletas emotivas que me soportan y que sin ellas tendría que vivir la autosuficiencia. Puede que tenga dificultad en discernir, elegir, y tomar el lugar que me toca.

Quiero atraer y tener la atención, la simpatía y el soporte de los demás. ¿Uso la alergia para tener amor?, Es posible. En cualquier caso, una cosa es segura: tengo una alergia porque rehusó una parte de mí mismo y mi lucha inconsciente es grande. Es mi resistencia, mi modo de decir no. Tengo el poder de decidir lo que es conveniente para mí en mi propio universo.

Es muy posible que si soy alérgico a algo, es que mi mental lo ha asociado a cierto recuerdo bueno o malo y que mi instinto lo rechaza en este momento. Cuando vuelva a vivir una situación que me recuerde este acontecimiento triste y desgarrador para mí, tendré esta alergia porque, en alguna parte,  mi cuerpo (mis sentidos) se acuerdan de todo y todo está grabado en mis células.

Si la situación vivida se acompaña de angustia, son los senos los que estarán afectados (resfriado del heno, estornudos). Si predomina el miedo, mi alergia se expresara más por la tos (dificultad en respirar) y si es una separación que viví con dificultad, las reacciones alérgicas se encontraran más a nivel de la piel (eczema, urticaria, dermatitis, etc.) La alergia a un alimento, está vinculada a una experiencia de frustración, de miedo a lo nuevo y de falta de confianza frente a la vida.

Así, en la base de la alergia, siempre hay una emoción de irritabilidad o de frustración asociada a un producto o a una situación por lo que representa para recordarme este malestar que debo integrar o concienciar.

Cambio de pensamiento.

Empezando a aceptar a nivel del corazón mi vida y mis miedos, el proceso de integración se activara y las alergias que complican mi existencia volverán al universo.

Necesito paz interior y sobre todo amor

Me mantengo abierto y sé que todo irá mejor.

LA AUTENTICA RIQUEZA





La riqueza es lo que hay en ti de auténtico, de sincero, de verdadero, tu creatividad, tu sensibilidad, tu capacidad para meditar; ahí está tu auténtica riqueza.

La sociedad te ha abocado a lo mundano, y te has olvidado por completo de que te han abocado a eso.

Recuerdo una historia que me contaron, una historia real:

Un día, en la India, un hombre iba en una moto,  y como hacía mucho frio se puso la chaqueta al revés, con la parte de detrás por delante, porque tenía mucho frio y el viento le daba de cara. Un sardar---los sardares son muy simples---También venía en su moto por el otro extremo de la carretera, y no daba crédito a sus ojos. Pensó: “Ese hombre tiene la cabeza al revés”.

Se asustó Tanto que al aproximarse chocó contra el pobre hombre que cayó al suelo casi inconsciente. El sardar lo miro detenidamente y dijo: “Dios mío, ¿Qué le ha pasado? La ciudad está lejos, el hospital está lejos, pero hay que hacer algo”.

Los sardares son las personas más fuertes de la India, y aquel pobre hombre estaba inconsciente. Así que le torció  la cabeza para colocarla bien, según como llevaba la chaqueta. En ese mismo momento llegó un coque celular y los policías preguntaron:

--- ¿Qué ocurre?

El sardar contestó:

---Han llegado justo a tiempo. Miren a este hombre: se ha caído de la moto.

Los policías preguntaron.

--- ¿Está muerto?

El sardar respondió:

---Estaba vivo cuando tenía la cabeza al revés. Cuando se la puse en su sitio dejó de respirar.

Los policías dijeron:

---Solo se ha fijado en la cabeza. ¡No se ha dado cuenta de que lo que está al revés es la chaqueta, no la cabeza!

El sardar replico:

Somos personas pobres y sencillas. Nunca había visto a nadie con una chaqueta con los botones a la espalda. Pensé que había tenido un accidente. Aunque estaba inconsciente, respiraba. Le torcí la cabeza. Me costó mucho trabajo, pero cuando quiero hacer algo, lo hago. Lo hice, y le enderece la cabeza hasta que adaptó perfectamente a la chaqueta. Entonces dejo de respirar. ¡Qué tipo tan raro!

Muchas personas te han torcido la cabeza, la mente, de muchas formas, según sus ideas de como deberías ser. No tenían mala intención. Tus padres te querían, los profesores te querían, la sociedad quiere que seas alguien. Tenían buenas intenciones, pero escaso entendimiento. Olvidaron que no se puede convertir un macizo de caléndula en un rosal, ni a la viceversa.

Lo único que puedes hacer es contribuir a que las rosas sean más grandes, a que tengan más color y más fragancia. Puedes aportar todos los productos químicos necesarios para transformar el color y el perfume --- el abono, la tierra adecuada, el riego conveniente en los momentos oportunos--- pero no conseguirás que el rosal de lotos.

Y si empiezas a decirle al rosal que tiene que dar flores de loto, lo estarás condicionando de mala manera, algo que solo contribuirá a que el rosal jamás de lotos. Además, su energía se canalizará mal, de modo que ni siquiera dará rosas, porque ¿De dónde sacará la energía para producirlas? Y entonces no habrá ni lotos ni rosas, y naturalmente, el pobre arbusto se sentirá vació, frustrado, yermo, indigno.

Y eso mismo les ocurre a los seres humanos. Con las mejores intenciones del mundo, todos quieren cambiar tu mente. En una sociedad mejor, con personas más comprensivas, nadie te cambiará. Todos te ayudaran a que seas tú mismo, y ser uno mismo es la mayor riqueza que se puede obtener en este mundo. Por el simple hecho de ser tú mismo y de crecer de acuerdo con tu naturaleza se cumplirá tu destino.

Y es que el impulso no es nada malo por sí mismo, sino cuando se desvían los objetivos. 

Tienes que mantenerte al margen de esas personas con buenas intenciones, de las buenas personas que no paran de aconsejarte que hagas esto o lo otros. Préstales atención y dales las gracias, porque no quieren hacerte ningún daño, pero al final lo que ocurre es que sí te hacen daño.

Solo debes hacerle caso a tu corazón: es es tu único maestro.

viernes, 17 de mayo de 2019

PERDONAR Y PASAR PAGINA





Si alguna vez te han hecho daño o has pasado por una situación muy difícil, seguro que te has preguntado para qué sirve perdonar. Además, seguro que también has experimentado en tu propia piel que hacerlo no es tarea fácil y, casi también con total seguridad, has confundido perdonar con olvidar. Lo cierto es que, una vez que algo o alguien nos hacen daño, pasar página no es fácil.
El olvido es un proceso de memoria (proceso amnésico) que depende casi pura y exclusivamente del tiempo y del contexto en el que te encuentres. Es decir, olvidar es el fruto que nace al dejar de recurrir a la información que tenemos almacenada en nuestro cerebro, mientras que perdonar es recordar y no quedarse anclado en la emoción que genera el recuerdo.
La verdad es que no podemos realizar muchos trucos para olvidar, porque el olvido es resultado del paso del tiempo. Ahora bien, será más fácil olvidar aquello con lo que no tenemos contacto, por ejemplo, si nos alejamos de sitio, evitamos ver a una persona o pasar por una situación, será más fácil y rápido olvidar. Por eso, para olvidar tenemos que alejarnos y esperar.
Sin embargo, perdonar es algo diferente, hacerlo significa que “a pesar de que recuerdo lo ocurrido, a pesar de que recuerdo el daño sufrido puedo pasar página y seguir adelante”. Hacer esto es dejar de pensar en venganzas, dejar de pensar en lo injusta que ha sido la situación y poder recolocar las emociones en el pasado, sin que afecten a nuestro presente ni a nuestro futuro.
¿Habías pensado en esta diferencia entre perdonar y olvidar? Ser consciente de que estas dos palabras no significan lo mismo, es imprescindible para ser capaz de pasar página. ¿Sabes por qué? Porque nunca olvidarás a quien te ha hecho daño, nunca olvidaras ese dolor, pero sí puedes aprender a vivir con ello si sabes dejarlo atrás.
¿Por qué es necesario aprender a perdonar?

Pasar página sirve para romper el vínculo que hay con el dolor. Se trata de que dejes de lado el dolor y de que las llamas de la ira, la rabia y la venganza se apaguen poco a poco, de este modo, serás libre para iniciar una nueva etapa.  Lograr esto te permite comenzar una nueva fase en tu vida en la cual, el dolor y la angustia caracterizan un momento de tu pasado pero no de tu presente.

Además perdonar hará que seas dueño de tu tiempo y energía al 100%. porque cuando una persona tiene conflictos sin resolver o etapas sin cerrar, aunque no se dé cuenta, su mente dedica mucho tiempo y energía a finalizar y cerrar estas “tareas pendientes”. Tener pendiente el “perdonar a alguien” hace que tus recursos psicológicos se destinen a esta tarea pendiente y, como consecuencia, se puede generar un gran agotamiento emocional.

Resolver los conflictos también sirve para sentirse más seguro y en paz con uno mismo, puesto que nos ayuda a avanzar y a mirar hacia el futuro sin cargas emocionales negativas que absorban nuestra energía y motivación. Alguien que perdona vacía su mochila emocional y se motiva con los retos del futuro, lleva consigo una sensación de paz interior que es insustituible y necesaria al 100% cuando quieres vivir plenamente.

Perdonar es una forma de coger las riendas de tu felicidad.

En este punto, es muy interesante que reflexionemos sobre un aspecto del perdón, que pocas personas tienen en cuenta. Cuando perdonas lo haces por ti mismo no por quien te hizo sufrir, sino más bien, es un regalo que te das a ti mismo. No perdonas y beneficias al otro, si perdonas te beneficias a ti en primera instancia, te permites aceptar el daño y el dolor y lo dejas en el pasado.

Por otro lado, perdonar es imprescindible para ser tu guía y líder. Pero, es más, puede ser que tengas que perdonarte a ti. Para ser el líder de tu vida tienes que perdonar tus errores, tus fracasos, tus puntos débiles, tus arrepentimientos, el haberte hecho daño a ti mismo, y así podríamos continuar con una larga lista de circunstancias que tengas que “perdonarte”.

Solo se accede a la autorrealización personal a través del perdón y la reconciliación con uno mismo, porque una vez lo haces, enfocas tu energía en crear la mejor versión de ti mismo y en tu proyecto vital como ser humano. Cuando perdonas aprendes a gestionar el perdón te sientes libre de decidir qué te afecta y que no, qué te impide seguir adelante y qué no, y así todo fluye y te concentras en ti mismo.

Perdonar no es tarea fácil, pero tampoco es imposible. De hecho, existen diferentes ejercicios de psicoterapia que pueden ayudarte a perdonar. El primer paso es concentrarte en tu presente y en tu futuro, responsabilizarte de aquí y ahora y ser dueño de tus emociones. Poco a poco, se consigue.

martes, 14 de mayo de 2019

SALTO CUÁNTICO





Tu paz interior  y tu felicidad dependen de aceptar que no puedes elegir lo que crees que debería ser, pero sí puedes escoger como quieres ver lo que ya tienes. Cuando juzgas como buena o mala una situación confundes la realidad con tu interpretación de ella.

Entonces harás que la paz sea imposible para ti, porque tendrás tu mente enfocada en conflictos. Y, por ley de correspondencia, conflictivas serán también las experiencias que el mundo exterior te brinde.

El doctor Hans Jenny (1904-1972), médico y científico suizo,  estudió las relaciones entre materia y energía y, respaldado por una metodología muy bien documentada, que puede ser reproducida en los laboratorios, construyo el fundamento de una nueva ciencia, a la que llamó “Cimatica”.

Catorce años de experimentación le llevaron a comprobar que el mayor o menor grado de complejidad molecular y evolutiva de un ser depende de las frecuencias de energía que reciba su cuerpo.

Una dimensión es la amplitud determinada de frecuencias vibratorias, que producen en la materia un diseño particular de patrones biológicos. Cambia la frecuencia, y el cuerpo muta en forma correspondiente.

Eso es lo que está ocurriendo con la vida en la Tierra, considerando que estamos siendo bombardeados por energías de altísima frecuencia, procedentes del Sol Central  Galáctico. El tiempo se ha estado acelerando y continuará haciéndolo en la medida en que nos aproximemos al momento crítico del cambio dimensional.

La llamada resonancia Schumann, o pulso de la Tierra, antes era una constante de 7,8 hertzios, ahora ha subido a 12, y tendrá todavía que elevarse a 13 hertzios. Cuando alcance ese punto, llegará el umbral donde nos estabilizaremos en una octava superior de frecuencia, y se iniciara para nosotros otra etapa de la creación, en una realidad diferente.

Igual que en los experimentos de Jenny, un ser vivo recibe esta energía como nueva información, que molecularmente se codifica en el ADN y lo transforma. El primer paso del cambio es hacia el caos, porque el modelo anterior debe disolverse, antes de que se pueda manifestar lo nuevo. En el siguiente paso los patrones se reorganizan en un orden más complejo, produciendo organismos más perfectos.

El nacimiento del hombre nuevo se dará en el momento en que el campo magnético de la Tierra alcance el punto 0. Solo en esa circunstancia se hace posible completar la reconfiguración de todos nuestros patrones genéticos, y hacerlos aptos para la vida en una dimensión más elevada.

La Tierra, es muy vulnerable a las emisiones electromagnéticas de las explosiones solares que recibe cada once años, cuando el sol completa un ciclo y pulsa. También existen ciclos Galácticos, y cuando uno de ellos termina, nuestro centro galáctico pulsa, disparando energías de frecuencias electro-magnéticas altísimas, que cambian las matrices de vida en toda la galaxia.

Estas frecuencias viajan como ondas, llevando paquetes de información nueva, que provocan un ordenamiento más complejo en todos los niveles, desde el solar planetario, hasta el molecular, con el consiguiente salto quántico en la apertura de consciencia y la evolución de la vida.

Todos los calendarios: Mayas, Tibetanos, Chinos, Egipcios, etc., coinciden en que, en la época en que vivimos hoy, se dará un cambio definitivo en la VIDA DE LA TIERRA.

Es pues este tiempo, único en la historia de la humanidad.



domingo, 12 de mayo de 2019

MENTE Y SUEÑO




Cuando la Biblia dice: "En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con Dios", es cierto tanto desde el punto de vista chamanístico como desde el científico. El sonido es perecido a la luz y posee el mismo poder generador que ésta. El sonido es energía que vibra a distintas velocidades. La energía pura tiene diversas cualidades: sonido, color, temperatura, movimiento, memoria y conciencia.

La vida también posee estas cualidades. Einstein, en su teoría del universo, comparó la energía con la masa y la velocidad de la luz. Los toltecas hicieron una observación parecida, aunque con otras palabras: "Todo es luz. Todo lo que conocemos se basa en la luz".

Desde un punto de vista etéreo, la vida humana en la Tierra fue creada para soñar. Los seres humanos creemos la realidad que percibimos en sueños, por tanto, todo lo que nuestros sentidos nos muestran no es sino una manifestación de nuestro sueño.

La transformación de energía en el sueño empieza con la materia. Recreamos la luz que percibimos reflejada de un objeto material como una imagen en el interior de nuestros ojos, siempre de modo indirecto. En este proceso también participan nuestras emociones. Las imágenes que recreamos en nuestra mente a partir de la luz reflejada se procesan a través de nuestras emociones, y esta actividad desarrolla nuestra mente.  Nuestra mente está formada por emociones, como nuestro cuerpo lo está por átomos.

Al nacer, el niño no tiene mente. Tiene la fase física (el cerebro), pero es inmaduro y, por tanto, deberá aprenderlo todo. El cerebro es un complejo de computadores en blanco. No es consciente. Aunque el recién nacido posee la memoria celular de la evolución y algunas emociones, no tiene la mente para crear el sueño.

El niño nace con todo el conocimiento del Universo, pero no puede pensar. Sólo sabe. Su ADN contiene el conocimiento silencioso de la vida. El sistema neuronal funciona en cuanto se desarrolla en el útero , pero antes de nacer no está en contacto directo con la luz exterior, sólo la percibe indirectamente a través de la madre; así pues, hasta que nace, la información que le llega es insuficiente.

Durante unos cuantos años después de nacer, el niño sigue libre como un animal salvaje. Todavía no está culturizado y, por tanto, no ha aceptado el sueño que su familia, la religión y la cultura le transmiten. Una vez que el niño lo esté, el desarrollo de su mente experimentará las emociones que se derivan del castigo y la recompensa.

Poco a poco, el niño aprende todas las normas del sistema que hereda y aprende a comportarse de un modo concreto. Aprehende el sueño de su sociedad, pero no lo elige.

Al final de la Era de Piscis, constatamos que nuestro sueño colectivo es un infierno, que nos ha envenenado tanto a nosotros como a la Tierra y, suponemos, también al universo. Por el bien de ambos, el sueño humano va corrigiéndose a medida que pasamos a la Era de Acuario. Cambiar nuestro sueño es un paso evolutivo adelante. Con cada era zodiacal, o cada Sol en términos aztecas, la evolución avanza. 

La evolución se dirigió durante milenios hacia el desarrollo de la capacidad humana de pensar, soñar y crear realidad. El siguiente paso es crecer más allá del temor, hacía la práctica del amor. El amor genera energía creativa benigna. Estamos descubriendo la frecuencia energética del amor y sus ventajas en la curación, la educación, la política y la espiritualidad.

viernes, 10 de mayo de 2019

SOMOS ACUARIANOS




Estamos entrando en la Era de Acuario, eso significa que debemos ser “Acuarianos de antemano”. Se accede a esta  Era con la luz de una consciencia despierta, con armonía y amor, y con la voluntad de comportarnos como seres humanos evolucionados.

La transición entre la Era de Piscis y la de Acuario no se efectúa de un día para otro, tenemos tiempo para conseguir encontrar la Verdad que nos libera, desarrollándola a consciencia. De esta forma superaremos lo que Piscis nos ofreció: la Fe y la Creencia a ciegas. La Fuerza de Acuario nos ayudara a eliminar de nuestro entorno todo lo que nos ata al pasado, todo lo que está cristalizado y no nos sirve. En este tránsito el ego sufre dolorosas destrucciones,  no así el Alma, ya que  el alma es “patrón de consciencia”, moneda de verdad, y nadie la toca jamás.

La Era de Acuario es la Era del humanismo, del conocimiento sin límites, de la total libertad, de los viajes espaciales y de la culminación científica. Pero lo interesante es darnos cuenta de que Acuario es el signo opuesto a Leo, signo en el que según datos prehistóricos el hombre comenzó sus primeros pasos de civilización, de hecho Leo es el signo de la creación, los hijos y el poder natural. Fue cuando el hombre surgió alzándose sobre el reino animal.

La Era de Cáncer es en la que se cultivó la tierra, se crearon las familias, las tribus, etc…y todas las necesidades primarias y emocionales  se desarrollaron en la raza humana.

Cuando entro la Era de Géminis, se creó la escritura, la palabra fue escrita propagando el intercambio de ideas, el comienzo del estudio y la concreción de nuestro entendimiento.

 La Era de Tauro, fue la Era de los Egipcios, en ella el hombre adquirió la valoración de la suntuosidad, de la belleza, la armonía en la estructura, la arquitectura, la máxima valoración del ser humano respecto a su Dios.

Cuando el ser humano entro en la Era de Aries descubrió la semilla filosófica, el razonamiento y el objetivo de sus deseos, fue la Era de los pioneros y los conquistadores, que sintieron la necesidad de implantar sus ideologías en otras partes del mundo. Fue la edad de los griegos y los romanos, y a partir de la caída del imperio Romano, entramos en la Era de Piscis la de la sutileza del entendimiento, y la separación del mundo objetivo y subjetivo.

Al llegar a Acuario podemos ver que  la esfera celestial ha dado media vuelta con respecto a la elíptica desde que comenzó la civilización que conocemos.

Siempre nos preguntamos quienes somos, pero lo cierto es que estamos cambiando a cada instante, millones de olas de pensamiento se canalizan a través del sistema de filtro de nuestros pensamientos. Caminamos influidos por las energías de nuestra mente, pensando, sintiendo, actuando, creando. Todas nuestras energías están unificadas con las energías cósmicas que nos llegan a través de los planetas, los cuales se alimentan de las constelaciones, poniendo en acción nuestras vidas.  

Es muy importante entender el dinamismo del comportamiento y la naturaleza de cada planeta, y saber cómo se conecta con la psicología del hombre.

La Astrología es un lenguaje cósmico que utiliza símbolos, que deben ser descifrados e interpretados, un horóscopo consta de cuatro factores básicos: planetas, signos, aspectos y casas.

Los planetas simbolizan energías, las constelaciones del Zodiaco signos en donde viven y colorean estas energías. Lo desciframos conociendo la clase de energía que emite un planeta y el signo donde está.

Los aspectos son las relaciones entre planetas o interacción entre varios signos y planetas, y se pueden comparar a una serie de focos de teatro de distintos colores situados en diferentes rincones del teatro, pero todos ellos dirigidos al escenario: la Tierra.

Las casas simbolizan lugares donde se desarrollan experiencias de la vida, aportándolas al ser interior, en un “escenario” giratorio (evolución).

Este “escenario” nos muestra los ambientes, donde tú, el actor, representaras tu papel.

VOLUNTARIOS EN LA TIERRA





Todo está compuesto de energía: la forma y configuración la determinan únicamente la frecuencia y la vibración. La energía nunca muere; solo cambia.

La Tierra está cambiando de vibración y frecuencia, preparando el advenimiento de una nueva dimensión. Existen innumerables dimensiones a nuestro alrededor, pero no podemos verlas porque sus vibraciones son muy elevadas y esto las hace invisibles a nuestros ojos.

La Tierra es una escuela a la que nosotros asistimos para aprender ciertas lecciones, pero no es la única. Tú mismo has vivido en otros planetas y en otras dimensiones. Has hecho muchas, muchas cosas, que ni siquiera puedes imaginar.

Muchas almas no tenían ninguna razón para ingresar en la densidad y negatividad de la Tierra; simplemente se presentaron voluntarios para ayudar a la humanidad y al planeta en este momento concreto.

Se considera que hay tres oleadas de almas nuevas que están viviendo en la Tierra. Han venido en estos tiempos de cambio porque  la mayoría de las personas que llevan viviendo aquí una vida tras otra, y han quedado atascadas en un karma y son incapaces de avanzar.
Han perdido de vista el objetivo de su vida en la Tierra.

Él bebe recién nacido parece llegar fresco y sin relación con nada, hasta el momento en que sus padres y la sociedad se lo enseñan todo. Pero eso está lejos de ser cierto. Los llamados “bebes” son en realidad almas muy viejas con cientos de viajes a lo largo de este escenario tan complicado al que llamamos “vida”, lo cual les proporciona datos que utilizan como referencia (inconscientemente) para saber cómo vivir como humanos.

Pero las almas nuevas de la Tierra no tienen este respaldo, y por tanto estarían totalmente perdidas, de no ser por un concepto muy ingenioso desarrollado en el espíritu llamado “imprimación”.

Cuando el alma está en el lado de los espíritus, se le muestra el tipo de vida en el que entrarían a continuación y ella proyecta un plan sobre cómo llevarla a cabo. Incluso acuerda con estas almas de qué manera trabajar cualquier tipo de karma.

Si el alma no tiene una experiencia de vida en la Tierra sobre la que respaldarse, se la lleva al Registro. El Registro Akásico, es el archivo de todas las vidas que se han vivido desde la creación. Así el alma elige las vidas que desea le serán impresas sobre el esquina de su alma.

Esto es lógico, ya que se trata de un método desarrollado para que las almas puras e inocentes puedan adaptarse a un mundo caótico y extraño como el nuestro. Sería imposible venir a la Tierra sin ningún tipo de preparación: un alma tierna no tendría nada a lo que aferrarse, y le sería imposible seguir adelante.

lunes, 6 de mayo de 2019

CONTRA LAS PICADURAS DE INSECTOS





En verano abundan los insectos Aunque a veces nos molesten, lo cierto es que tienen un papel esencial en el ciclo de la vida sobre la Tierra. Sin ellos, muchas plantas no llegarían siquiera a florecer. Los atraen hacia sí para ser polinizadas. Al mismo tiempo, promueven mecanismos químicos para ahuyentarlos cuando conviene, a través de partículas volátiles que saturan el ambiente. Por ello pueden ser ellas las que nos ayuden a mantenerlos alejados.

Estas son 5 plantas aliadas contra las picaduras de insectos:

1. La malva (Malvasylvestris) se ha empleado tradicionalmente para curar afecciones de piel y, ante todo picaduras. Flores y hojas, con mucilagos y taninos, son antiinflamatorias y cicatrizantes.

Cuando conviene: para bajar la inflamación y eliminar el picor de picaduras de todo tipo de insecto volador que se manifieste con hinchazón, enrojecimiento, entumecimiento o cierto hormigueo.

Como se utiliza: con la decocción (unos 50 g de planta seca por litro de agua) se lava la zona o se empapan unas compresas y se aplican sobre la picadura unos minutos; en cataplasmas de hojas, combinadas con linaza en polvo y calentadas al baño de María; y el jugo de la planta fresca, vertido sobre la picadura.

2. Helenio Antealergico (inulahelenium) una planta robusta con grandes capítulos florales de color amarillo, se emplean con fines medicinales el rizoma y la raíz.

Cuando conviene: es muy conveniente en caso de reacción alérgica por picadura. Ayuda a eliminar urticarias y granos y a cicatrizar la herida si se infecta. Actúa como antihistamínico natural aliviando la congestión pulmonar, los ataques de tos, la rinitis y la conjuntivitis.

Como se utiliza: por vía interna, la decocción (unos 25 g por litro de agua), preferentemente combinada con plantas que mejoren el sabor, como el hinojo; y la decocción por vía externa en compresas tibias, para aplicar sobre el área afectada.

3. Clavo de olor contra los mosquitos. Del clavero (Eugenia caryophyllata), un árbol tropical originario de las Filipinas y las Molucas, se usan los capullos florales. Son ricos en aceite esencial y contienen mucilagos y esteroles.

Cuando conviene: su fragancia ofrece una alternativa a los repelentes sintéticos frente a moscas, mosquitos, hormigas y pulgones. También es útil para desinflamar y desinfectar picaduras de avispa y tábano y favorecer la cicatrización.

Cómo se utiliza: se vierten unas gotas de aceite esencial sobre la ropa o, muy diluidas en aceite vegetal, sobre la piel; se aplican en masaje los clavos macerados en alcohol, o bien se empapan unas compresas con la decocción. Se usan también como difusor repelente, clavados en una manzana o un corcho.

4. Llantén Menor para picaduras de avispa. (Plantago Lanceolata), Esta planta poco vistosa, que aparece en márgenes de caminos y herbazales, se considera un tesoro en los herbolarios. Se cosechan sus sumidades floridas. Es expectorante, antialérgica y cicatrizante.

Cuando conviene: es un buen aliado para alérgicos a las picaduras de avispa, abeja o tábano. Combate los síntomas de la reacción y restaura las mucosas.

Cómo se utiliza: por vía interna, la infusión, una cucharada sopera por taza, mejor si se combina con malvavisco, helicristo y anís verde; por vía externa, la infusión de 15 g de llantén con arcilla roja para formar una pasta espesa y aplicar una capa de 2mm sobre la picadura; y las hojas frescas en cataplasma.

5. Aloe Regenerador. (Aloebarbadensis). La pulpa de aloe contiene un líquido viscoso rico en mucilagos, de gran poder dermoprotector y demulcente. Basta practicar una pequeña incisión en la hoja para obtenerlo.

Cuando conviene: entre sus muchos beneficios, restaura el epitelio y favorece su regeneración tras la picadura.

Como se utiliza: aplicando la pulpa fresca directamente sobre el área afectada, o bien esta en forma de gel o en extracto líquido, de venta en herbolarios.



Donde se esconden: Vale la pena conocer las preferencias de los insectos para prevenir a tiempo. El mosquito abunda cerca de agua estancada. La abeja, donde hay flores, en prados y jardines y la avispa, en espacios abiertos. La garrapata se esconde en riberas y matorrales. Y la hormiga roja, menos habitual, solo pica para defenderse.