Lilith en la Carta Astrológica.
El símbolo empleado para representar a Lilith es una luna negra, opuesto
al que se emplea para la Luna real.
La posición de la Luna Negra en una carta de nacimiento muestra el lado
oscuro de la personalidad, un lado que existe en cada persona, y que cada uno
lo manifiesta con sus propios matices. Este es el lado de la personalidad que
llevará inevitablemente a la persona a su caída si ella la alimenta.
Contiene las tentaciones que se esconden a un nivel
profundo en nuestro subconsciente, así como nuestra atracción por acciones
reprobables, tanto en un nivel moral como en un nivel ético, todo lo cual puede
eventualmente conducir a la destrucción de nuestra personalidad.
Lilith no es capaz de desencadenar eventos de la vida real como lo hacen
otros planetas, su impacto se ejerce en la psique, en nuestras pasiones y en lo
más profundo de nuestros deseos. La Luna Negra genera un vórtice astral que
despierta emociones y deseos fuertes, difuminando la conciencia y evitando que
controlemos o regulemos su influencia.
La posición de Lilith en nuestro horóscopo también muestra qué tipo de
personas entre las que no encontramos en el camino, jugarán papeles
provocativos en nuestras vidas, o incluso ser nuestros enemigos. Todos estos
papeles están destinados a ayudarnos en nuestra evolución, por lo que es mejor
no guardar rencores contra las personas que tienen que jugar.
Debemos comprender que se les impone a pesar de su
propia voluntad y es mejor para nosotros centrarnos en las manifestaciones
negativas de Lilith en nuestra propia psique, así como en sus efectos sobre
nuestro propio comportamiento, de acuerdo con su posición en nuestro horóscopo.
La Luna Oscura describe nuestra relación con lo absoluto, con el
sacrificio como tal, y muestra cómo nos desapegamos. En tránsito, Lilith indica
alguna forma de frustración, a menudo en las áreas del deseo, una incapacidad
psíquica o una inhibición general. También muestra dónde nos cuestionamos a
nosotros mismos, nuestras vidas, nuestro trabajo, nuestras creencias etc.
Indica dónde podemos dejar que la Totalidad
fluya dentro de nosotros, sin atravesar un “Yo” en el camino, sin levantar un
muro en forma de ego. Al mismo tiempo simboliza la firme voluntad de estar
abierto y confiado, de dejar que el Mundo Trascendental fluya a través de uno,
confiando enteramente en las grandes leyes del universo. A fin de prepararnos
para esta apertura, la Luna Oscura crea un vacío necesario.
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