Son muchos los cambios que la entrada
de la nueva energía está realizando a través de cada uno de nosotros. Ya
habréis notado que a cada momento, la energía que nos rodea toma un nuevo
curso, según la calidad de nuestros pensamientos,
sentimientos y acciones. Comenzamos a ser conscientes de nuestro poder de
“creación”.
Cada creación que realizamos impacta en
todos los aspectos de nuestro entorno
generando cambios en las personas, actividades, ambiente, naturaleza,
relaciones; así como en los flujos energéticos ya existentes.
Ahora, más que nunca, es indispensable
hacer un alto diariamente a través de la observación-meditación, para
distinguir aquello que nos distrae e impide el disfrutar y poder cumplir
con facilidad el verdadero propósito de nuestra vida.
Día a día vamos moldeando
conscientemente, los diferentes matices del ser que estamos dispuestos a
manifestar ahora. Para conseguirlo es imprescindible el percatarnos
de “cómo” nos sentimos
viviendo la realidad que ahora, cada uno está transitando.
La intensa energía solar entrante,
facilita nuestro despertar y aumenta nuestra comprensión de la responsabilidad
de nuestras creaciones y de su incidencia en el bien común. Sabemos no obstante
que estamos siendo apoyados desde el amor para dar el paso decidido en nuestra
evolución personal y como especie.
La energía de la nueva realidad es una energía universal que nos
aleja de la creación inconsciente dual, y solo se proyecta para dar paso a lo
que se ha iluminado conscientemente a través del amor.
Actualmente nos encontrarnos inmersos,
dentro de una corriente de energía divina multicolor en continuo y
ondulante movimiento. Al inicio de esta energía podemos sentir momentos de
vértigo, pero irán desapareciendo
conforme aprendamos a fluir y estar totalmente conscientes a cada momento.
Ya sabéis que
Energía es Luz, y que Luz es Información y que la Luz (la nueva Información)
transforma “todo lo que toca”. Esta nueva energía porta:
La
energía ondulada filtrante que delimita la realidad de la Nueva Tierra
La
energía de las parejas divinas y la energía ancestral universal que se
reconecta en esa unión.
La
energía de acuerdos armónicos y alegre creatividad en la pareja
La
energía que conforma las familias y su propósito divino
La
energía que porta a los niños que llegan iluminados a la Nueva Tierra
La
energía que impulsa los proyectos alineados con la evolución cósmica del
planeta
La
energía que porta la sabiduría, para la era dorada en la Nueva Tierra
La
energía expansiva y evolutiva para las formas de vida de la nueva era
La
nueva energía que está siendo creada en el sol.
El
apoyo y presencia total de Nuestras
Familias Divinas y Cósmicas en la Nueva Tierra
Esta
energía que amplía su potencia a medida que penetramos en el Equinoccio Primaveral se caracteriza por
manifestar Felicidad, Abundancia y
Amor a través de lo que está alineado a la voluntad divina.
Esto genera una gran confianza, al
estar siempre provistos de lo necesario y de lo que merecemos, sin dañar a
otros o a nosotros mismos.
J.A, Marcos
Fonfria.
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